Francisco de Rojas Zorrilla
(Toledo, 1607-Madrid, 1648)
Francisco de Rojas Zorrilla murió a los 40 años habiendo disfrutado de lo que resuena como una vida de esparcimiento en Madrid. Durante años, fue el dramaturgo predilecto de la corte, conocido como “Don Francisco de Roxas, poeta florido y galante “ (Pérez de Montalbán, 1632). Parece que tomó parte protagónica en las más variadas celebraciones en el Retiro, festejos a la llegada de grandes damas, vejámenes y academias poéticas que compatibilizaba con una gran actividad teatral. Llegó a estrenar una comedia por mes entre 1635 y 1636. Su actividad sólo se vio frenada durante la clausura de los teatros (1644-1646). Su fama continuó tras su repentino fallecimiento gracias a la calidad de su obra, con títulos como Los bandos de Verona, Donde hay agravios no hay celos, Los áspides de Cleopatra, El catalán Serrallonga o Entre bobos anda el juego.